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En elaboración, hasta que pueda desocuparme y termine de medir el caudal de significantes que corre por las cañerías. Contacto: juansoloideas@gmail.com

Octavio Paz

"El poema es un espacio cargado de inminencia, una parvada de signos que buscan su significado. Y la nueva poesía será de la otredad, una poesía en la que se juega una percepción simultánea de que somos otros sin dejar de ser lo que somos y que, sin cesar de estar donde estamos, nuestro verdadero ser está en otra parte".

El Otro

Lacan dice que la constitución del cuerpo depende del Otro. Es a partir de la relación con el Otro primordial que se constituye el cuerpo del niño. El otro, al mismo tiempo que lo confronta con su imagen, le dice por ejemplo: "Tenés los ojos de tu padre".
Esos significantes pronunciados por los padres se ligan a su imagen y se incorporan a la identidad que el niño asume.
La identificación simbólica impide que el niño quede atrapado en el mundo imaginario.

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¿Literatura autista-verbosa?


Jacques Lacan sorprende cuando indica que no es el mutismo lo que le parece lo más sorprendente entre los autistas, sino la verborrea. Ni siquiera se trata de una observación clínica, cuya pertinencia no se dudaría, sino de la orientación esencial para abordar la especificidad de un tipo clínico original. ¿Qué es la verborrea? Sino un uso de la lengua de donde la enunciación se ausentó. Ahora bien, la enunciación inscribe el goce vocal en el campo del lenguaje. La voz como objeto pulsional no es la sonoridad de la palabra [voz], sino la manifestación en el decir del ser del sujeto.Es una constante mayor del funcionamiento autístico el protegerse de toda emergencia angustiosa del objeto voz. De la suya propia, por la verborrea o el mutismo, de la del Otro, por el evitamiento de la interlocución. El autista es un sujeto que se caracteriza por no haber incorporado el objeto vocal que soporta la identificación primordial, resulta de eso una carencia de Sí, en su función representativa del sujeto. Cuando el goce del viviente no se cifra en el significante, la manifestación clínica más manifiesta, subrayada por todos los autistas de alto nivel, reside en una escisión dolorosa entre los afectos y el intelecto. Las otras características del cuadro clínico son algunas de las consecuencias.
La representación más difundida autista es efectivamente la de un ser mudo, de modo que Lacan sorprende, con ocasión de una de sus raras indicaciones concernientes a estos sujetos, calificándolos de "verbosos": "Qué le cueste entender [escuchar], dar su alcance a lo que dicen, no impide que sean personajes más bien verbosos”

psicologia

Diálogo con mi Otro

-- El Lenguaje es el camino y la Poesía el atajo.
-- ¿ Te parece que es así ?
-- Seguro. Pero, ¡atención! en el atajo nos encontramos con lo inesperado del sendero. Todo pedrusco tosco.
-- ¡Furtivo risco! Te agrego que el poema-travesía requiere de un esfuerzo descomunal para poder levantar el velo del horizonte.
-- Velo... velo... rugoso acre. Nos obliga a revisitar todo de nuevo. Engendrar cordeles.
-- ¡ Reeducarnos ?
-- Si. Se espera siempre que la poesía desenvuelva aquello diferente que no está a la vista de lo que seduce la acción de los hombres.
-- ¿ De qué materia está hecha la seducción de los hombres ?
-- Se hace muy difícil percibirla. Seguramente, en una anómala época de improbidades, lo único que pueda salvarnos es abrir caminos con la poesía.
-- ¿ Volveremos a la senda de Homero ?
-- ¿¡... !?
.
.
.

POESÍA ESPECTRAL

Nos orienta, para la composición poética, a usar el más amplio espectro del discantar y la atrevida recién llegada voz del reflejo.
Más el formato, que la sumisa matriz.
Más el cómo de la armonía, que el qué de la melodía.
Más arquitectura vegetal, que materia rústica.
Ni gongorizar ni estar en la vena lugoneante del realismo residual
Hacia una quebradura doble de la palabra y la sintaxis en cautiverio.
La del sueño.
La de la dermis simbolizable.
La de los significantes indulgentes.
Algún día caerá la viruta impresionista de la forma,
y todo será refinado fundamento,
asunto,
luz.

miércoles, 20 de marzo de 2024

El Parecer

 .

martes, 19 de marzo de 2024

Atasco

 .

Puente Saavedra
un obrero bebe un vino y mira
fui soso toda mi vida
transité de inocente a culpable
¿de qué se trata este juego?
todo te choca
buscar adjetivos
desolaciones
este entuerto
a diestra y siniestra
¿Cómo entramos?
cómo hacemos para salir
uno no encuentra palabras
orfandad lingual
geografía incierta
hablar en mandarín
¿se aprende sobre la marcha?
lo vimos y no aprendimos
uno es uno
no lo otro
te encontrás con otras 
ruedas atascadas en el barro
el infierno de Dante
¿va a seguir así?
recién comienza y es prematuro
nos resistimos
liendres dedicando amores
siguendo la alerta roja
hay de todo para todo
intrusión de viento oscuro
aspaventados por el cortaviento
destituído
descréditado
desorejado.

Juan Disante  -  5-1-24

Fallido

 Había visto en este diciembre ido

dos afluentes sin apuros
anclando horizontes separados
con certezas discontinuas
arrostrados por retóricas verbales
apechugados por inducción inerte
(unidos por pulsión de muerte).
Habré ojeado sólo en diciembre
a unos muy sueltos de cuerpo
bien peinados y corbata al cuello
tinieblas ciegas
híbrida prosa
capaces de excederse de sí mismo.
(ululando desorientes).
Percibía otros con dos palomas
y tres nubes en sus frentes
con saberes que recuperan la memoria
tercos insistentes de lo veraz
milicianos del verso rústico
no habrá pontón pero sí razón.
(voy afirmando en mente).
Sí, pude distinguir en soledad
mundillos inversos
amaneceres discordantes
pretéritos imperfectos
siestas interrumpidas
recogimiento y retiro
(averiguados precedentes).
Hasta más ver
quisiera notar en algún diciembre
participios nominadores
el rehacerse después del desgarro
dar vuelta el registro verbo
turba y conciencia del "vería"
(de la profesante fuente).
Que en algún diciembre manso
el lenguaje no nos abandone
que no valga la pena el apagón final
ni con metáforas artificiales
ni con venias algorítmicas.
Solo igualdades gramaticales
(... como faltoso repitente).

                            Di Juan  24-12-23

viernes, 5 de enero de 2024

El Tiempo Perdido

 Aquellas horas del tiempo perdido

convierte en aplomo la rémora verso
llora el peso de lo abandonado
transita el latigazo del arrepentido.

¿A quién pedir rebobinar el acuerdo ?
sin dejar de crecer en el pasado
sin confundir futuro en oscura niebla
sin subyugar en blanco borrador... 
... el recuerdo.

                                                               Juan Disante  -  5/1/24  -  10 hs. -
                                                                                                                                                                   Feliz año.

lunes, 1 de enero de 2024

Vago 24

 Fue fecundo el 23

le dio forma a la voz
la hizo material
dejó ver el bebé de un gigante
la razón de un naciente
extrañaremos la llamita del 23
huiremos de sus riesgos fatuos
pediremos que nos visite
ya habíamos estado con él
instalado en la piel ramificada
no es un adivino el 23
es profeta y nos vigila
la búsqueda de un nuevo camino
apenas señalado
advierte sobre los peligros 
de la cómoda ceguera
el 23
previene sobre nuestra mansedumbre
empellón anunciado a nuestra adolescencia
señala el momento privilegiado del 24
comenzará a amontonarse el silabario
a transmitir el vértigo
la atención de las propias responsabilidades
la autonomía de San Mateo
relación entre realismo y ficción
o locura
si preferir lo que viene del 24
por lo ignoto 
los subtítulos
lo desafiante
lo insoportable
el dominio de nuestras decisiones
aún sin un gran deseo descubierto
creyendo que se acerca el fin de algo
espectador del escarnio de la letra
de la historia
lo vital puede pasar a la historia
lo evocativo puede pasar a un costado
esclavos del nacimiento somos
el 24 es un fantasma cultural desconocido
rebelde - incierto - crítico - audaz - único
o lo contrario desde la lingüística
arribar a pequeñeces
para el 24
señalar una nueva teoría podría condenar
el futuro de quienes trazan estas palabras :
lo incontestable del 24.
Juan Disante  -  Argentina  -  

sábado, 30 de diciembre de 2023

No te apures

 

No te apures

puedo esperarte tanto
para reconocernos más
comprendernos mil
entrañar tu tardanza
soportar mi impaciencia
ya aprendí a no apurar
al leer tu calmo tesón
a glosar tu indulgencia
te aguardaré fiel y fe 
principiaré a tejer tus lanas
prolongar ufana espera
te aguardaré muchos siglos
tu querida Penélope.

                                    Juan  

domingo, 24 de diciembre de 2023

Pan y vino

 Tal vez en el lunario plata de Noche Buena

resbalen nuestras gotas por el vidrio de la ventana
como contrición de lágrimas del perdón y el amor
y muchos de los nuestros estarán en la mesa
esperando al caminante en pan silencioso y vino
que llegará a nuestras casas para brindar 
junto a la savia fresca de la tierra en sus sandalias
y una pura luz donde florezca el árbol de la gracia.
juan

El domingo, amor y pastas.

lunes, 18 de septiembre de 2023

Buscarlapa

 

.

eso de fatigar la palabra
buscar en grandes volúmenes
seguir el movimiento de miles de labios
                        la palabra
escuchar su fónica
haber transitado tantas lenguas
la palabra
devolverle atenciones
acariciar su presencia
sentir su anatomía
                      en lo oculto
la palabra
recorriendo el universo tras su forma
                      palo duro desconvocar
y revolver el pasado
subir un tono
borrar un pacto
sin desflorarla

             "el tiempo dirá" dije vencido

y después de un sueño de turba
encontrarla sobre la mesa del desayuno
al lado del pan caliente
el día menos pensado
la palabra
Juandí

sábado, 2 de septiembre de 2023

Poemitas

 08 abril 2012

LA  PLAYA


El verano se ha ido con tus cosas a cuesta.


Sólo me queda barrer las arenas

con un paso enlutado

y encontrar las sombras

de tus perdidos clamores,

tu lápiz labial,

una horquilla,

tus preguntas,

el anillo,

tu esencia preferida,

la discusión sobre el desarreglo.


Tu acaracolada huella mutará mi forma.


Sólo me queda

pedirle al mar que no se la lleve

con la última ola

hasta algún otro cierto

destonado verano.



EXPLICARME


Quisiera explicarme tanto como digo

explicarme a diente este arder

la molienda desigual de mi tono gótico

y el por qué del contrapaso


También saber en una hojuela

lo habitual de mis marcas

el descalzo encargo por más dulces

y el vasto crepuscular sentido


Mi escarchado timbre del sí

las noches refunfuñas en azul

el rechazo del decoro y la noción

y el sitio perdido de mi desván


Enfrentar cada desuso de mi destierro

yendo y viniendo

decir entre dientes la verborrea

y el cauto desplazarse de los signos


Cuánto quisiera explicarme

el atavío matriz de anteayeres

tono y desentono

y el por cuando del recuerdo y del olvido


Conocer en un dialecto ámbar

mi gratulante deambular de fatalismo

y el por qué de ti

el por qué el por qué el por qué

de ti

y de los pasos perdidos

Juandí / 2012

viernes, 25 de agosto de 2023

HISTORIA Y ESTILO NARRATIVO

 Los relatos narran una serie de sucesos encadenados.

En la forma de narrarlos existen tantas como narradores.
¿Se puede anteponer la forma, o discurso, a la historia contada ?
Lo ideal tradicionalmente es mantener un equilibrio entre una cuestión u otra, aunque en el taller recomendamos, al comenzar la primera escritura, poner el acento en la idea o por lo menos en algún germen de idea. Habíamos ya recorrido la clase de cómo podemos estar alerta y favorecer el surgimiento de una idea. Y habíamos visto que nunca es imprescindible contar previamente con una idea completa y definitiva. Generalmente después de comenzar la escritura van apareciendo muchos nuevos elementos de la historia a contar. 
Toda narración es resultado de un proceso basado en la interacción de dos fuerzas: "lo que pasó" y "la manera como se cuenta".
Por lo tanto hay que distinguir  los siguientes planos :

1) LA HISTORIA, EL ARGUMENTO: Son los hechos relatados, que comprenden a los personajes y a las acciones. En esta narración predomina el realismo. 
"En el subte, un tipo de unos 30 años, sombrero de fieltro con cordón en lugar de cinta, cuello muy largo como si se le hubiera estirado. La gente baja. El tipo se enfada con un viajero. Le reprocha que lo empuje cuando alguien pasa. Tono llorón que se las da de duro. Al ver un asiento libre, se precipita sobre él. Dos horas más tarde, lo encuentro en la Plaza de Mayo. Está con un compañero que le dice "Deberías ponerte un botón más en el abrigo".
 
2) EL DISCURSO O ESTILO. Corresponde al modo de narrar. De la misma historia se pueden escribir muchas versiones distintas. Allí también puede variar la información. Es decir, se puede aplicar de entrada, al final u ocultar. En esta narración predomina la poesía y la narrativa experimental.
"Te deberías poner un botón en el abrigo que te aprieta ese cuello estirado, le dijo su amigo. Me lo encontré a la defensiva y triste en la Plaza de Mayo después que se precipitaba alegre a la ofensiva sobre un asiento. Cuando alguien entraba o salía, este descarnado joven se ponía y se sacaba un sombrero cubre ideas tan ridículo como un clown de circo. Todo esto ocurrió en un subte completo y tan extraño como todos sus pasajeros. Por favor".  

jueves, 24 de agosto de 2023

Tacones y cielo

 



Obra/instalación del artista japonés Kohei Nawa

Por el pasillo largo y silencioso
llegarás
golpeteando tus tacones
en una esfera comba 
como tus pasos
y sentiré tu llegada 
en la misma puerta de la ciencia pura
toc... toc...

medirás las horas
de nuestros estudios de laboratorio
pero las arenas del reloj detendrán su torbellino
tu caminar inquieto retumbará en el espacio
toc... toc...
entonces veré
un universo tan curvo y musical
como tu taconeo  
Juan Disante
.

martes, 22 de agosto de 2023

La casa grande ( en construcción )

 Resultado de imagen para cielo


Tenme bajo tu techo fiel
es bueno hablar
Universo
individuo y total no separados
lo bueno/malo no existe (coexisten)
no hay apetitos
sólo deseos
soles enteros tapando las sombritas
de los rostros
bajo la leche cósmica del nacer
francas puertas de ingreso
de tierra negra en tu amplio estar
infinitas ventanas a lo por venir
formación estelar
fuimos hechos
de tu donada materia oscura
de masas solares
de energía galáctica
cúmulo-relumbrón de nuestro ser
completando la ceñida medida de crecer humanos
semilla nuclear sostendremos
sin albas ni ocasos
soy retirada célula asombrada y muda
un corto astrónomo en busca de tus habitaciones
para sentir tu aliento de esplendor
alojarme en la hamaca paraguaya
tejida con cuerdas del Bosón de Higgs
donde me siento no leído
el dormitorio donde una mujer y un hombre
hacen la siesta
se aman
sueñan
eluden el llanto
la cocina donde antojamos el desayuno
la sopa
el día
abrigándonos en el fogón de los dichos
tomando lo necesario
donde nadie juega a los dados
criamos a nuestros hijos
en jardines de pura luz
el campo adentro de Einstein
la materia y todo su contrario
donde todo se apelmaza
fluyendo de proposiciones en veloz calma
nada es estable e inmutable
con leyes tan cercanas a certezas ausentes
rehuyendo el dolor
no habrá armónicos fárragos de babeles
sin bretes
sin conversión
esperanzando a Stephen Hawking
muéstranos tu lengua súper simétrica y quebrada
donde amadrigaron sus nidos
lejanos abuelos en cobijas soleadas
de sistemas eclípticos
y una universalidad espejante
que copió nuestros cuerpos mortales
nuestras descendencias
nuestros hogares tibios de cenas humeantes
orbitando
hay observancia en las ventanas
hay recurrencia en lo que parece desorden
explicaba Poincaré:
memoria
resonancia
franquear  la casa
sustraerse a las diferencias
tal vez deberíamos
ayudar a la creación a evitarle el trabajo
del buen orden cósmico:
entendernos en el cuidado
de nuestra residencia abierta
de nuestros acervos
para después del banquete
que el anonimato sea nuestra postrer ansia
y afluencia de verbo
adomiciliarnos 
                         adomiciliarnos
                                                  adomiciliarnos.
JOTADÍ

domingo, 2 de julio de 2023

Escribir - 1 -

                                                                     1 - Escribir

El deseo de escribir es el mejor pasaporte hacia el territorio de la escritura. Es el único requisito. Pero ocurre que los humanos tenemos un conflicto con los deseos propios, estamos inhibidos, los contenemos con limitaciones. La lista de ejemplos es inagotable. Por lo tanto hay una pilla salida. Es posible tomar el camino de conocer los secretos, las técnicas, ciertos trucos del oficio. Esto no va a ser suficiente, pero ayudará a encontrar nuevas vías para alimentar el proceso.

Escribir es fundamentalmente una práctica pensante. Encararla implica dejarnos llevar por nuestros pensamientos, tanto los más pequeños y ridículos como los más triviales o importantes. Nada es manido o vulgar a la hora de escribir. Todo vale.

De palabras está hecho el universo, porque es el verbo de una persona viviente. Dejarse llevar. Con no sólo palabras puras o exquisitas, sino las ambiguas, las malditas, las románticas, las atrevidas, las disfrazadas, las seductoras, las del habla común y las del no común. Acostumbrarse a que forman parte del Goce y el Placer.

Seguir necesariamente el hilo cronológico en la escritura no es la única manera. No es irrestricto copiar la realidad tal cual su orden cotidiano, sino transformarla mediante ideas. imaginar lo que pudiera haber sido y no sólo contar lo que es. Cada persona guarda en su mente, miles de recuerdos, de imágenes, de convicciones ideológicas, de dolores, alegrías e incomodidades. Todas esas vivencias y pensamientos no debe ser sólo un pretexto para informar. Es favorable saltear los pasos lógicos, tergiversarlos, eludirlos, o rebuscar las determinaciones ocultas, no manifestadas, de cada una de esas realidades o acciones. Las ideas están en todas partes. Es necesario curiosear, indagar, provocar, zaherir, remedar.

También se escribe para conocerse uno mismo, porque verbalmente no se consigue decir lo que se desea o se siente. Escribimos porque la escritura nos brinda la única oportunidad de rectificar semanas después lo que hemos escrito; en cambio lo oral no.

Escribir es una actividad semejante a soñar. Contaba Sigmund Freud, que había una vez en un pueblo de España, en que todos los varones estaban perdidamente enamorados de la misma mujer. Un conflicto en potencia. Hasta que un día, uno de ellos, amaneció diciendo que se sentía liberado de esa obsesión. Se reunieron todos los hombres en una taberna para indagarlo, muy interesados en cómo lo había conseguido, entonces les contó que esa noche había soñado que esa mujer lo amaba él. Y así fue como ese personaje enamorado resolvió el conflicto. Está demás decir que algunos de los compañeros del bodegón, apuraron su caña y se fueron rápidamente a dormir la siesta. Otros no. Idénticos resultados se pueden conseguir escribiendo. Tal vez dando vuelta la historia de Freud al revés.

1- Convencerse que todo el mundo puede escribir. 2- No censurarse durante el proceso. 3- Mirar una misma cosa de diferentes maneras o al revés. 4- Convertirnos en quienes no somos ni seremos nunca. 5- Ser capaz de saltar de un lugar a otro y de un tiempo a otro.

Las palabras reflejan el pensamiento, pero a veces son escasas las que usamos. Revisando nuestro archivo mental, a veces encontramos muchas ideas, pero estamos carentes de palabras. Muchas personas se quejan de su imposibilidad para expresar por escrito lo que piensan. Ocurre que nuestro conocimiento de la lengua suele ser mayor que nuestra capacidad de usarla. Para salvar el momento, es eficaz trabajar con unas mismas palabras iniciales que nos surgieron y visitar un diccionario de sinónimos y antónimos. Allí encontraremos otras palabras que nos derivarán a varios otros sentidos, lugares, y nos darán otras perspectivas y una fuente de inspiración. Prueben con Oculto - Natural - Negación. Luego asociar una palabra con otra. Una idea con otra. Y tratar de rescatar el otro lado de las cosas. Es muy útil 1º) Seleccionar las ideas. 2º) Empezar por un borrador. 3º) Analizar el tema. 4º) Hallar y asociar ideas afines.   

¿Dónde se instala el germen de una Idea? Nuestra meta es descubrirlo. algunos gérmenes son débiles y necesitan de otros para crecer y juntos generan una idea. Ésta suele definirse como la representación mental de algo imaginario o real. Pero cuando se instala en nuestra mente, deja de pertenecer a lo real y se constituye como parte del creador en contraposición a lo real. Los caminos parten de lo Real, la participación del pensador lo convierte en una Realidad perteneciente a ambos y el proceso es transformarse en Imaginación. Surge lo ficcional.

Previamente, obligarse a tener un argumento previo y completo resulta coercitivo para las idea conformadas. Ideas son comienzos, son finales: en  realidad son puntas, nada más que puntas del ovillo del cual se tiran. Suele suceder que se tiene un tema aparentemente definido, que nos convence. sin embargo al disponernos a llevarlo al papel no lo plasmamos como lo hemos "visto" mentalmente. Pero luego, durante la escritura, otros gérmenes aparecen y se multiplican y nos desvían hacia otras direcciones que no habíamos previsto. Goethe le decía a un amigo: "Me preguntaban cuál era la idea que quise encarnar en "Fausto", ¡como si yo mismo lo supiera o pudiera explicarlo!" 

No olvidemos que escribir es, entre otras muchas cosas, transgredir las normas y las reglas, ir más allá de lo que se supone que se esperaba. Pero no descartar ninguna motivación para empezar un relato que relaciona lo vivido con lo imaginario en variados contenidos.

Hay dos tipos de final de relato. estos son: 1) EL CESE, considerado que el relato acaba definitivamente, sin dejar puntos oscuros por resolver. Generalmente se resuelve un enigma. 2) EL DESENLACE, cuando el relato acaba en apariencia, sin explicitarlo. Y deja al lector con una gran libertad de interpretación o que imagine la resolución o continuación por distintas vías o salidas. Para que el final sea eficaz, debería cumplir con las siguientes condiciones: Ser coherente con el texto anterior, ser significativo y dejar huella en el lector. 

¿Cómo y de cuántas maneras miramos? Mirar literariamente es dar un significado a lo que nos rodea. Mirando podemos traspasar lo real. Nuestro mirar no es mecánico, nuestros ojos están orientados por nuestros deseos y objetivos. Nuestra capacidad de percibir es poder dirigirla siguiendo un proyecto creativo. En la consigna que dimos del cieguito sentado en un banco con un vecino, todos veían un forma indefinida a lo lejos y equivocadamente suponían que era algo con impermeable amarillo y un paraguas verde debajo. Sin embargo cuando el ciego preguntó cuáles eran sus características y su color, él ratificó que era el árbol más antiguo del planeta, Ginko Bilova, con cualidades muy curativas pero que no se dejaba ver tan fácilmente, sin saber su difícil causa (sólo los ciegos). Construir textos o poemas a través de juegos visuales es una variante productiva.

¿Qué es el Tema? Es lo más difícil de abordar; nunca conseguimos atraparlo totalmente. Muchos escritores comienzan a escribir a partir de una frase o una imagen y descubren el tema al final del texto. El tema engloba las ideas principales y da sentido a la narración, pero su concreción depende de todos los otros elementos que la constituyen: el argumento, la trama, los hechos, los personajes, los acontecimientos, los impedimentos, etc. Los tres elementos clave de la estructura temática son: 1º) El eje temático. 2º) Los motivos temáticos. 3º) El "leitmotiv". Los temas se pueden desarrollar en forma directa o tangencial. En la metamorfosis de Franz Kafka, el protagonista, hijo de una familia de clase media, se convierte en un insecto. Pero el tema central, desarrollado tangencialmente, es el de las peculiares malas relaciones que existen entre los miembros de su familia. En una narración, el tema, el argumento y la trama son elementos interdependientes y cada uno genera los restantes. El argumento es la síntesis lineal, lógica y cronológica de la historia, la base para desarrollar el tema. La trama es la organización de los acontecimientos, el esqueleto que sostiene y encadena los episodios. El tema y el argumento son algo abstracto hasta que éste se plasma, mediante una trama. Por ejemplo, en las obras en las que se dramatiza la vida y la muerte, no es el argumento lo que conmueven al lector, sino su tratamiento, el modo en que se ha tramado la historia como consecuencia de la visión del narrador-escritor. Es decir, el motivo que justifique la narración. En clase, volveremos insistentemente sobre este punto.

Repasen los escritos y poemas que están acá debajo y comenten que movilidad les produce.

         



    


    

domingo, 19 de marzo de 2023

Abuelo

 

Soberano del ejército campechano 
quiero retroceder torpe
a esta migración
que tardo nadie pinta.
Quiero encontrar las huellas
de tu nombre 
y saber de tanta huída
hacia atrás,
el revés de brumas.
Quiero desandar tus piernas
y me cuesta.
Sordedad de mi yo
que no cesa
ni termina de apartarnos. 
Tu búsqueda jóven de salidas francas
al gran atascadero global
de tus cercanías
¿o de tus adentros?
Inventor solitario inquisidor,
oriundo,
hablo de tí y de tí me muestro,
nos persiguen rebeldías iguales
a sí mismo,
emotividades,
pulsiones,
nuestro origen céltico
bravío
rastreador del ante.
Congénere de mis ansias
sigo tu cripta del desgano
lejos de tus montañas
de cabras,
manzanilla y sueños.
Fronda dorada
se trata que seas lo mismo
que mis nostalgias
para que escapemos de la artrosis
de este mundo agrietado y en tropel.
Peleamos embrollados
acariciando,
confundiendo,
copulando,
soñando volver siempre al origen.
Mirando allá
quiero ir a tu encuentro,
                       no sé si podré sin tu fe... 

Juan Disante, viajando de Buenos Aires a Asturias.

jueves, 16 de marzo de 2023

El límite imperfecto de la gramática ya no alcanza.


Había visto en este diciembre ido
dos afluentes sin apuro
anclando horizontes separados
con certezas discontinuas
por retóricas verbales
apechugados por inducción inerte
                             (unidos por pulsión de muerte).

Habré ojeado sólo en diciembre
a unos muy sueltos de cuerpo
bien peinados, corbata al cuello
tinieblas ciegas
híbrida prosa
capaces de excederse de sí mismo
                             (ululando desorientes).

Percibía otros con dos palomas
y tres nubes en sus frentes
saberes que recuperan la memoria
tercos insistentes de lo veraz
milicianos del verso rústico
no habrá pontones pero sí razón
                             (voy afirmando en mente).

Sí, pude distinguir en soledad
mundillos inversos
amaneceres discordantes
pretéritos imperfectos
siestas interrumpidas
recogimiento y retiro
                            (averiguados precedentes).

Hasta más ver
quisiera notar en algún diciembre
participios nominadores
el rehacerse tras el desgarro
dar vuelta el registro verbo
turba y conciencia del "vería"
                           (de la profesante fuente).

Que en algún diciembre manso
el lenguaje no nos abandone
que no valga la pena el apagón final
ni con metáforas artificiales
o con venias algorítmicas.
Sólo igualdades gramaticales
                           (como faltoso repitente). 

Juan Disante -  Navidad / 2022 - Argentina

domingo, 25 de diciembre de 2022

Esperanza en Navidad

Cuánto más esperar
la esperanza sin la espera,
cuánto traficar el tiempo
cada gris quincena
medianoche de longueras
intermedio de la era,
cuánto más de verte
sin permisos
sin despose
sin augurios ni vislumbres
con falta horario... 
                 en las fechas.
¿...?

juandisante@gmail.com 

domingo, 27 de noviembre de 2022

IR y VENIR

Fuiste porque estabas seguro. Volviste porque estás en la duda.

Fuiste para acelerar el Todo. Volviste porque el trigo no apremia su crecimiento.

Fuiste por estar a muchos pasos del jubileo. Volviste buscando la masa crítica.

Fuiste dispuesto a fragmentar. Volviste a equivaler.

Fuiste conjeturando. Volviste verificando.

Fuiste a testimoniar. Volviste oteando una ley emancipadora.

Fuiste con el significado. Volviste por el significante.


El dar todo por hecho es siempre el error del apuro.

Peregrinar y volver atascan la medida armónica... 

necesitan del Otro.

Juan Disante  -  Argentina 2022

lunes, 7 de noviembre de 2022

Patinando

 

Crecientemente, la población latinoamericana se desplaza en patines de dos ruedas.
Y los que miran, aparte de mirar, quieren intentar.
Visto desde abajo, los patinadores acometen un símbolo. Todo es forma.
Es así que los que miran, se empeñan por entender, pero no entienden.
Entonces los patinadores siguen patinando, hacen piruetas. Se ríen a carcajadas.
Por aquí, por allá, unos vientos los vienen, otros los van.
Los que no patinan quieren establecer normas.
Los unos acometen, los otros completen.
Los patines carecen de luces de giro, entonces esto aflora preocupación. Aflora.
Lo otro desaflora.
Esa pequeñísima gente, antes de comprar un chile o un celular, prefiere ahorrar y apropiarse de patines.
Qué raro que le suena a algunos. Y resuena: “No tiene ninguna utilidad”.
Sólo permite desplazarse alrededor de las verdulerías y de los gerundios con cierta vivacidad.
El pasavolante dice: “Yo estoy por el cambio”. Y produce vaivenes con su figura.
Se inclina hacia un lado… luego hacia el otro, como en un vals. Yendo.
Y el grandísimo que mira no se pronuncia, dice hablar por las narices. Viniendo.
Y quiere aprender a empujar el pie derecho contra el piso. Pero le preocupa el choque.
“Las colisiones son fatales”.
De alguna manera, los patinadores desandan veredas y quieren ocupar las andaduras.
Y es sabido que con poco esfuerzo, hacen un mundo.
Conforme al uso, se comprometen con lo incierto, las traducciones y el compromiso.
"Se ci guardiamo, ci vediamo". (Si nos miramos, nos vemos).
La velocidad enloquece. Por ello el patinador circula cadencioso, desempedrando las calles.
A mediana prisa.
Y los automovilistas que pasan como una bala en dirección a sus oficinas, frenan de golpe, estiran su cuello y observan al patinador que no utiliza naftas especiales, ni tiene frenos.
Fundadores al paso, sólo desenfrenos.
Y ven con preocupación que cada día son más.
Los que patinan son amantes de los errores, los ceros y de algo opíparo.
Los que miran se hacen cruces.
Mientras, un matrimonio con sus dos hijos, compran pochoclo y entran todos a un cine
en patines de dos ruedas.
Juan Disante  -  Latinoamérica

jueves, 13 de octubre de 2022

Mercado frente al mar.

 

Senso

.
No soy un número en las estanterías

Por las mañanas al levantarme
el mar sacude mis orillas,
las cataratas me contienen,
el viento que rodea mis piernas
se lleva los pantalones.
La lluvia altera todo goce
cuando desde el balcón miro el cielo
buscando gaviotas
desnudo

Si en todo esto alguien supone sexo,
no está mal,
supone sexo.
En las ramblas de los márgenes
retumba la gran ciudad,
dentro de ella los mercados
desatan sus gritos
sus pasiones.
Los feriantes descargan hortalizas de sus carros,
en sus mandados las señoras
inclinan la cabeza sobre las nabizas,
un joven mira como una joven
aspira el aroma de las frutillas,
las muchachas cohibidas tocan con su meñique
los pimientos rojos.

"Deme medio kilo, pero que sean lindos".

Todo sonríen de felicidad.
La voz de un tenor le canta a Nápoles.
¿Acaso el mar no entrega su sal al piropo perdidizo
del alcachofero?
¿Y el viento no levanta las faldas de las niñas
que compran perejil?
¿No será que la lengua de las cataratas lame el ombligo de las toronjas
y la lluvia eterniza los humedales del género?
Una pareja de perdigueros juguetea al tocamiento.

El erizo alardea de arrullos.

El aroma de la albahaca se mezcla con los del pecorino.
Y el puestero de pescados,
que acaba de abrir una corvina para la parrilla,
sopla un beso al aire que termina cayendo
en una cadera bendecida y ostentosa.
Las aguas salobres y yodadas
mojan los pies de los changadores que cargan cajones
repletos de zanahorias betacaroténicas y remolachas azoradas de osadía
para la piel bronceada de las casaderas.

No soy un número.

No encuentro respuesta a los glotones apetitos
de la ciudad,
sólo reconozco en los íntimos mercados
el dejarse rodear por la libidez de un mar retozón
en olas que acosan la costanera del senso.
Bienoliente mar
que no cabe de travieso
en donde la expansividad del pepino,
la carnalidad del brócoli,
o la coquetería de las achuras
son sólo una excusa para el cariño
de las mañanas juguetonas
del tira y afloja.

Juan Disante - Villa Gesell